Item talk:Q44601

Bautista 2020-12-20:

“En una lista de mss. comprados por Gayangos a uno de los herederos de Llaguno […] en primer lugar aparece un asiento bastante detallado, que corresponde sin duda al mismo texto de BNE MSS/3238:

Un tomo en fol. menor de letra del siglo XV que empieza por fol. 51 y cap. XII de una historia o crónica que puede serlo de la Casa de Haro. Hacia el medio del tomo, fol. 87-90 se hallan insertos los Anales toledanos. Al fin se lee lo siguiente: Este tratado se acabó describir para el senor (sic) don Diego Lopez de Haro, miercoles 26 dias del mes de otubre de MCCCCLXXXVI años’.”

Se ha suprimido el texid 4486 por ser duplicado de este registro, integrando sus dados con los de este.

García 1899 analiza el texto y discute si podría ser del cardenal Pedro González de Mendoza:

‘A la portada [de BNE MSS/3238(20] sigue una especie de piadosa dedicatoria á Jesucristo, que está falta del principio, y el texto comienza con un tratado de los reyes y de los señores de Vizcaya que fueron del linaje de Haro y alcaldes de las apelaciones. Más que obra genealógica es todo este libro tratado de la casa de Haro en sus relaciones con la historia de España, no sujeto á método rigoroso, ni en todo exacto cuanto á fechas y sucesos, interpolado con poco pertinentes disertaciones, y aun con parte de los Anales toledanos y otros, que sin duda el autor incluyó ya muy avanzado su libro, para más autorizar sus narraciones. Ciertamente que introdujo en ellas pocas cosas nuevas, y que las estampó sin mucho orden, como va dicho, y sin avanzar hasta los últimos reinados, teniendo á la vista las crónicas más en uso en su tiempo.

Esta obra, ¿es del cardenal Mendoza, como reza la portada? No hay dato para negarlo. Desde luego, por el estilo literario y por el lenguaje corresponde á su tiempo, y en el epígrafe de uno de sus capitulos se habla del rey D. Juan, «padre de la Reyna nuestra señora Doña Isabel». El afán de moralizar y de hacer aplicaciones de la doctrina cristiana que se advierte en la dedicatoria ó prefacio y en el cuerpo mismo del libro, es muy propio de prelado tan piadoso y docto como era el cardenal. Pero no se encuentra en el libro alusión alguna, directa ó indirecta, que se refiera á éste como autor del tratado, ni siquiera cuando trata del linaje del Cid, del que creía descender, ni del de los Mendozas, de que fué clarísimo ornamento. Es más: en el folio 159 se cita al cardenal como testimonio de la narración, y no como autor; pero esto pudo ser, sin duda, porque la obra del prelado se reformase más adelante por algún genealogista.

De que era muy aficionado á esta clase de estudios hay bastantes testimonios. El muy noticioso P. Pecha asegura que «escribió Arboles de su mano muchos, en especial se haze mencion de el de los de Haro Señores de Vizcaya», por ser muy devoto de la de lectura de genealogías, historias, crónicas y nobiliarios de las prosapias ilustres de España.
Más claramente habla Salazar de Mendoza [Crónica del Gran Cardenal]: «En mi poder està vn muy copioso tratado suyo, de los de Haro, que fueron señores, y Condes de Vizcaya, y tan valerosos….. , en que mostró muy bien lo mucho que supo de historia, y de la nobleza de estos Reynos.»”